Ahora, sin embargo, he empezado el proceso de romper el cascarón donde me escondía. Quiero mostrar al mundo la verdadera Silvia, la que siempre debí ser si no hubiera dejado que las inseguridades se apoderarán de mí. Puede que nunca rebose suficiente confianza o puede que sí, eso se verá por el camino.
Igual no sea la más guapa, ni la más lista ni tampoco divertida, pero estoy dispuesta a mostrarme transparente como el agua, sentirme bien conmigo misma siempre debió ser mi meta y, ahora, la voy a llevar a cabo
No va a ser un cambio radical, no se va a producir de la noche a la mañana, no me volveré de pronto una charlatana cuando siempre he sido callada, lo voy a hacer cada día, rompiendo el cascarón a trocitos, algunos trozos serán más grandes que otros pero los quitaré todos y por fin, saldrá a la luz la verdadera yo, a la que no le importaría destacar en algo pero que algún día descubrirá que es ese ALGO que le hace destacar